sábado, 30 de julio de 2011

Un ejemplo de nicho: trading

La cena de despedida de Benicassim y de vacaciones playeras me ha dejado un momento interesante. Durante esa cena me presentaron a @yrabassa (Yuri Rabassa) y la conversación que entablamos me lleva, en parte, a escribir este post. @yrabassa es trader de divisas y co-fundador del blog www.forexduet.com
Iba la cena por los cauces habituales cuando empezó a explicar su trabajo. Trading, mercado de divisas. Un mundo desconocido, no, lo siguiente, para mí. Pero todo cambia cuando surge el tema del emprendimiento, la comunicación, la formación, la autoinvención... La cosa cambia. Y me cuenta que tiene un blog en el que cuenta EN DIRECTO como hace sus operaciones. Sigue la charla y aparece la mítica palabra nicho. Enganchado.
Al llegar a casa, obviamente, echo un ojo rápido a la última entrada de su blog para ver qué era eso que me ha contado. Es demasiado tarde y el tema del vídeo-blog, el trading, no es que sea de fácil asimilación para no iniciados, por lo que lo he dejado para esta mañana. Se trata de una entrada en la explica cómo ha tomado sus decisiones y sus razones. Además, explica que durante los últimos tres meses ha realizado operaciones contándolas en directo, lo que le supone una presión extra. Es curioso, y lógico. Vista y escuchada esa entrada me surgen diferentes ideas.

Hablamos ahora mucho de opengovernment. ¿Se puede hace openbussines? ¿Es posible que los hombres de negocios puedan contar sus movimientos live on line? Evidentemente, hay decisiones estratégicas de empresas que deben ser secretas, pero en negocios como el trading puede ser interesante para abrir los ojos a quienes no lo conocen, para atraer inversores, para mejorar la imagen personal y, fundamentalmente, para dar una imagen real de algo desconocido. Evitas especulaciones sobre cómo ganas el dinero y tu manera de trabajar.

Centrándonos en cuestiones de comunicación, aparece el tema nicho. Me llama la atención como una expresión suya la había escuchado un par de años atrás en boca de @rafa_aguilera. Explico a @yrabassa mi experiencia con Itxako y el nicho balonmano femenino. Y completa la frase, como hizo Rafa, balonmano femenino... de zurdas! Cuanto más específico, mejor es el nicho.

Coincidimos en la necesidad de buscar un hueco no atendido por otros medios, pero también en la necesidad de formación exigente del comunicador. Para la gente que hace trading, la prensa especializada económica (Expansión), es prensa generalista, necesitan algo mucho más específico y están dispuestos a pagarlo. Pero claro, es una audiencia superexigente. Si escucháis la entrada, la terminología es muy muy técnica, al alcance de pocos profesionales de la comunicación.

La cuestión del fracaso como parte de la vida y el negocio también aparece en la conversación. Fallar es tan posible como inevitable, pero hay que aprovecharse del error para reinventarse. Sin embargo, la presentación pública de error no es sencilla. Me cuenta que se plantea dejar de operar live on line (también en su última entrada) porque la presión diaria de las decisiones es mucha, pero que te vean si aciertas o fallas aumenta la presión y tiene miedo a que le perjudique.

Y con ello volvemos al inicio de las reflexiones sobre lo bonito que es el openX y lo exigente que es también. Es precioso hablar de transparencia, pero muy duro enfrentarse de verdad a ella. Dejar las vergüenzas y las virtudes al aire te pide mucho a cambio y los réditos a corto plazo son poco visibles. Eso sí, tu reputación se robustece mucho.

Para terminar dejo el tema de la escucha, de las reacciones de los demás. Me cuenta @yrabassa que la sensación de ver muchos comentarios a cada entrada le ha enriquecido mucho, le hace plantearse seguir aunque le exija mucho. Ver que tu contenido llena a otros nos gusta a todos, pero también hay que medir hasta que punto es sólo cuestión de ego o si realmente los comentarios de otros aportan algo a tu negocio (en este caso).

Por todo esto, espero comentarios vuestros y seguiré a @yrabassa aunque sea el único de sus seguidores que no tenga ni idea de cómo funciona el índice Forex.


lunes, 25 de julio de 2011

Tuiteo eventual


Durante el pasado fin de semana he seguido lo que ha tuiteado, escrito y publicado @puytri (Puy Trigueros, perdón por la foto robada de su blog www.turistacompulsiva.blogspot.com y gracias) sobre su experiencia en el Tour con el equipo Euskaltel. Esto coincide en el tiempo con la lectura del libro "Mundo Twitter" de @jlori (José Luis Orihuela) y, además, con la experiencia que he tenido (junto a @amarkule y @davidcontinente, Amaia Markuleta y David Continente) en el proyecto #viviritxako del equipo Itxako de balonmano femenino.
Junto todo ello porque estaría bien que alguien ofreciera un "manual" de como hacer una cobertura de un evento en redes sociales. Lo digo porque @jlori no lo menciona de manera explícita en su libro y porque la experiencia de gente con conocimiento en el tema como @puytri o @amarkule nos puede dar ciertos conceptos básicos al resto a la hora de enfrentar un evento y contarlo a través de medios sociales.
Evidentemente, el tipo de evento y los medios humanos y técnicos son los que marcan realmente el tipo de cobertura que se puede hacer, pero quizás se puedan apuntar unas líneas básicas para cualquier evento. Como a mí me ha tocado hacerlo con el proyecto #viviritxako de la mano de Amaia y David, yo planteo unos conceptos que me encantaría que la gente que sabe los pueda completar y corregir.
Nosotros nos hemos ceñido a cuestiones deportivas, claro, con Itxako, pero creo que hay ciertas pautas extensibles a cualquier tipo de evento. Nos ha tocado diferentes tipo de coberturas: de un sólo partido, de una competición o de dos semanas enteras de "evento", como fue el caso de la final de la Liga de Campeonas o las semifinales.
De lo leído, visto y hecho, saco las siguientes conclusiones:



-Tener claro el objetivo fundamental de la cobertura. Tener claro a quién nos interesa que llegue de mejor manera la información. Se puede dar información más enfocada a medios de comunicación porque ellos esperan saber lo que sucede en ese evento, o hacerlo de manera más informal si es para nuestros seguidores habituales. O quizás de un modo más específico si buscamos a nuestra audiencia (seguidores y fans) más técnica.
Todo esto condicionará la cantidad de contenido, su formato y el lenguaje a utilizar. Parece que es muy evidente, pero es fundamental.

-Hacerse un timing de publicaciones. Planear, dentro de lo que se pueda, lo que se va a publicar y cada cuanto tiempo. Nuestro evento es fundamental para nosotros y para parte de nuestros fans y seguidores, pero puede que no para todos. Ser un pesado no es lo mejor, ya se sabe. Además, hacer un plan previo permite trabajar mejor y optimizar recursos.

-No olvidar cual es la información esencial que espera la audiencia. Dar los datos fundamentales correctamente y cuanto antes. A veces, por querer contar las cosas de un modo diferente y buscar otras cosas, se olvida lo fundamental. Dar el resultado del partido, el de una votación, las declaraciones de un protagonista... Eso no puede faltar.

-Sin perjuicio de lo anterior, ofrecer detalles también es necesario. Ofrece exclusividad porque permite conocer lo que no sabrán quienes no te sigan y le da un toque de color a la cobertura. La información posterior en medios de comunicación, si es el caso, no dará habitualmente estos detalles. Una foto curiosa (sirva como ejemplo la que ilustra el post), un dato diferente... Complementan y fidelizan la "transmisión".

-Variar los formatos del contenido. Lo ideal es poder ofrecer fotos, vídeos, tuits, entradas de web, sonidos... Está claro que depende de los medios técnicos y humanos de los que se disponga. En la cobertura de Copa de la Reina o semifinales y final de Champions con #viviritxako pudimos llegar a muchos formatos y la verdad es que enriquece mucho la cobertura.

-Los vídeos suelen ser los reyes del contenido. Un buen contenido audiovisual suele darle
un empujón muy fuerte a la cobertura. Sobre todo si se es capaz de hacerse con calidad, suelen ser contenidos muy vistos, con mucho éxito. Tener un cámara-editor como @davidcontinente ayuda mucho.

-La calidad de los contenidos audiovisuales no es fundamental. Lo que se cuente tiene que ser interesante, pero la audiencia "perdona" que un vídeo o una foto sean hechos con el iphone o el teléfono. Como decía antes, lo ideal es que sea de buena calidad, pero si transmite lo que se busca, la calidad no es trascendental. Hay que ser más exigente con el audio de las entrevistas o declaraciones, si no se entiende bien, mejor no publicar porque se genera un interés que luego no se confirma.

-Se pueden hacer contenidos diferenciados para cada red social. Quizás una foto puede ir mejor en el Facebook o una frase ingeniosa mejor como tuit o un vídeo más dirigido a un público Tuenti. Evidentemente, los datos básicos han de ser transmitidos en todas las redes de las que se dispone para el evento.

Son algunas de las conclusiones que me vienen a la cabeza digamos que a bote pronto, espero, por favor, que l@s que sabéis me echéis un cable para mejorar de cara a futuro con comentarios, sugerencias y vuestras conclusiones. Este tipo de coberturas están en un permanente estado beta por lo que se pueden completar estas ideas cada poco tiempo.
De todos modos, muchas gracias por adelantado.

domingo, 17 de julio de 2011

¿Somos portada?

Empiezo este texto en respuesta a la cuestión que plantea Miguel Angel Jimeno (@majimeno) en Twitter:

El arresto de la "mano derecha" de Murdoch abre muchos digitales españoles. ¿Es para abrir?, ¿interesa a la gente?

Se pone sobre la mesa un tema que me parece muy interesante. Cambiamos a Murdoch por, por ejemplo, Botín o Florentino Pérez. Y ponemos la hipótesis de que el proyecto que se ha cerrado por el motivo que se ha cerrado no es News of the World y sí el Banco Santander o ACS. ¿Es para abrir un diario digital?

Mi respuesta a la pregunta es que, a veces, no damos importancia a lo que sucede en las empresas informativas y la trascendencia que puede tener para nuestra audiencia. Es verdad que nosotros no somos la noticia y que estamos para ser sólo quienes transmiten las cosas que suceden, pero informamos de lo que sucede en otros sectores y en el nuestro no.

Informamos y llevamos a portada los problemas de la construcción, la industria del automóvil u otras, pero poco se sabe de la nuestra. Conocemos las características de los productos que compramos en otros sectores, pero no tanto del que ofrecemos nosotros. Seguramente, para nuestra audiencia, sería interesante conocer mejor el funcionamiento de los medios para elegir que información consumen.

No digo ya dar detalles del funcionamiento del día a día de cada empresa, pero sí podemos, por ejemplo, dar más información de quién firma las informaciones, se me ocurre. En vez de firmar con un simple nombre, podríamos dar un perfil de Twitter, donde se pueda comprobar quién es el profesional que informa, o, por lo menos, su identidad digital.

Seguramente, la opinión sobre la profesional y las empresas podría cambiar si se conociera mejor cómo funcionan las cosas en algunos casos concretos. ¿Compraríamos un Volkswagen o un Renault si supiéramos que un tanto por ciento de los trabajadores son becarios o personal sin la formación necesaria?

¿Es menos importante nuestra industria que otras? ¿Mueve menos dinero que otras? ¿No es influyente para las decisiones estratégicas que se toman en otros sectores? No es que a nuestra audiencia esté interesada en todas nuestras miserias, pero sí en cuestiones relevantes, como en cualquier otro sector económico.

Es más, me planteo, ahora que está muy de moda hacer de todo un OPEN, por ejemplo, Open Goverment... ¿Sería posible el Open Media? Que la audiencia sepa quién cuenta qué y si tiene algún tipo de interés en lo que cuenta. Que la audiencia sepa algo más de cómo se realiza la información. Evidentemente, las empresas dirán que no, pero puede ser el reto de los blogeros independientes.

Respondo a una pregunta, me lío, me desvío y hago otra pregunta.

jueves, 14 de julio de 2011

La hora de la balanza

Mal está que lo diga yo, pero tenía muy dejado esto del blog. Más vale que mis vacaciones me han dado un poco de oxígeno para sentarme a escribir un rato. Mira si lo tenía abandonado que lo he tenido que cambiar del todo porque al anterior no le funcionaba ni el editor de textos. El caso es que, por fin, me siento a poner por escrito las cosas que tengo atrasadas por contar. Voy por ello.

La verdad es que me sorprendo a mí mismo. Me he pillado leyendo el libro "Mundo Twitter" de @jlori (José Luis Orihuela) y me he abroncado razonablemente. No fui a sus clases en la uni y ahora me compro sus libros quince años después. No me aclaro, definitivamente, no me aclaro. Lo mismo me estoy haciendo mayor...

El caso es que llevo tiempo dándole vueltas a la cabeza sobre la idea de lo que aporta y lo que resta el andar pendiente de ese mundo que algunos llaman 2.0 (Txema Valenzuela me increpará sólo por citarlo), pero que cada vez está más mezclado con nuestro día a día. Vamos, que es el momento balanza de los últimos tiempos que he gastado.

Tuitear, escuchar, subir una foto al FB, echar un ojo a lo que cuentan los amigos, acordarme de los cumpleaños... Lleva su tiempo y alguna enganchada esporádica con los más cercanos, es cierto, y, además, no asegura un uso completo de lo que significan estos medios sociales. Sin embargo, los aportes no han estado mal.

Varias cosas han cambiado no desde que entro en las redes sociales, sino desde que las utilizo, fundamentalmente, como herramienta profesional (también personal). He variado algunas maneras de pensar y también ciertas maneras de relacionarme con las personas que ya conocía y con otras que antes ni sabía que existían.

En el ámbito personal he recuperado ciertas relaciones personales dejadas y ya eso me merece la pena. Además, he visto como también se modificaban las conversaciones con personas que ya conocía hace mucho tiempo y con las que tenía amistad. Los últimos cafés con @aormaechea (Ana Ormaechea) han sido de lo más curiosos y de lo menos esperado, si lo pensamos sólo un par de años atrás.

El caso es muy similar con @rafa_aguilera (Rafa Aguilera). Hemos pasado de muchas horas de avión charlando sobre fútbol, pero esos ratos han derivado ya en conversaciones bien diferentes. La profesión, la comunicación o la formación han ganado el sitio de esas charlas a los sesudos debates futboleros.

Gracias a la actividad y el uso de estas herramientas he conocido a gente que, seguramente, no hubiera conocido de otro modo. Personas que están en otros ámbitos de la profesión que aportan cosas muy interesantes en el día a día. @dianagonzalez (Diana González) o @puytri (Puy Trigueros) son algunos de los muchos ejemplos de gente que sabe mucho de nuestro mundillo y con la que me he visto hablando de cosas que pensaba que no iban conmigo y ahora me atraen.

Me gusta la idea de que el cliché que se tiene del periodista futbolero se pueda romper gracias a eso de la identidad digital y su traslado a las relaciones personales diarias. Seguro que más de un@ se puede sorprender de que nuestra visión del curro en algunos casos honrosos vaya más allá de balones y árbitros.

Con todo esto, yo creo que puedo decir que mi balanza se inclina definitivamente a seguir con toda esta historia y ver dónde nos lleva. Yo no tengo ni idea de cual será el rumbo definitivo, pero el camino parece interesante y tiene pinta de que nuestra generación puede ser la que abandere un cambio en la profesión. Los ingenieros no están dando herramientas para hacerlo, así que habrá que intentarlo.